Pablo Picasso, Mujer en el reloj ($139,363,500 USD)
El cuadro de 1932 obtuvo el segundo precio más alto en una subasta para una obra del fallecido artista con la cifra de 139,3 millones de dólares. Este monto representa el segundo precio más elevado jamás pagado por una obra de este distinguido artista, quien falleció hace 50 años.
La pintura trata de un retrato de Marie-Thérèse Walter, una de las compañeras y musas de Picasso, quien era una destacada pintora francesa. La obra, valorada en más de 120 millones de dólares según la estimación de la casa de subastas, anteriormente pertenecía a la acaudalada neoyorquina Emily Fisher Landau, quien poseía una colección impresionante que incluía obras de artistas como Jasper Johns, Willem de Kooning, Mark Rothko y Andy Warhol.
Picasso, tras esta venta, cuenta ya con al menos seis cuadros que superan los USD 100 millones.
Gustav Klimt, Dame mit Fächer (La dama del abanico) (106.756.354 USD )
La pintura, creada por el artista austriaco Gustav Klimt entre 1917 y 1918, fue subastada en Londres por la notable suma de US$94,3 millones durante una subasta organizada por la reconocida casa Sotheby’s.
La «Dama con abanico» logró superar el récord previo de la obra de arte más cara de Europa que ostentaba la escultura estilizada del italiano Alberto Giacometti, titulada Walking Man I. Este récord se mantenía desde 2010, cuando la escultura alcanzó la cifra de 65 millones de libras (equivalentes a 75,5 millones de euros en la tasa de cambio actual), consolidándose como la obra más valiosa vendida en una subasta europea hasta la fecha.
Esta pintura, que destaca por ser un retrato de mujer, está impregnada de motivos orientales, formando parte del japonismo. Esta corriente artística, que floreció a fines del siglo XIX y principios del XX en el arte occidental, se caracteriza por la marcada influencia de la estética japonesa, y Klimt exploró en este movimiento en algunas de sus obras.
Claude Monet, La cuenca de las ninfas ($74.010.000 USD)
En la venta nocturna de arte impresionista y moderno de Christie’s en Nueva York en noviembre, la pintura superó su estimación proyectada de 65 millones de dólares al venderse por la impresionante suma de 74 millones de dólares. Previamente a esta venta, «Le bassin aux nymphéas» nunca había sido expuesto ni subastado, permaneciendo como una obra «no descubierta» en la colección privada de una familia durante más de 50 años. Esta pintura ahora ocupa el sexto lugar como la obra más cara de Monet vendida en una subasta, con el récord aún en manos de «Meules» (1890), que alcanzó la cifra de 110,7 millones de dólares.
Jean-Michel Basquiat, El Gran Espectáculo (El Nilo) ($67.110.000 USD)
Pintada en 1983 deja ver explícitamente las influencias africanas del artista junto a lo que parece ser un barco egipcio dirigido por el dios Osiris, navegando por las ciudades de Memphis y Thebes en Tennessee, que llevan nombres egipcios.
Esta obra hacía parte de la colección del diseñador de moda Valentino Garavani, quien la adquirió por 5,2 millones de dólares en 2005. Desde entonces, ha ocupado un lugar destacado como una de las piezas principales en lo que Garavani denominaba el «Garavani Museum».
«El Gran Espectáculo» ahora se posiciona como la cuarta pintura más costosa del artista.. Sin embargo, aún se encuentra lejos del récord establecido por la obra «Untitled» de 1982, vendida en Sotheby’s en 2017 por la asombrosa cifra de 110,5 millones de dólares.
Gustav Klimt, Insel im Attersee (Isla en Attersee) ($53,188,500 USD)
En una subasta de la casa Sotheby’s en Nueva York, el cuadro de Klimt titulado ‘Insel im Attersee’, creado en 1902, logró alcanzar la notable cifra de 53,2 millones de dólares después de una puja que se prolongó durante siete minutos y en la que participaron tres compradores. Este evento marcó la primera gran venta de la temporada en Sotheby’s en 2023.
La pintura, que representa uno de los pocos paisajes creados por el artista austriaco Gustav Klimt durante toda su carrera, busca capturar los matices del sol sobre el agua y los reflejos multicolores que emergen, destacándose por el dominio de tonalidades verdes y una técnica que evoca el puntillismo.
Klimt fue el único artista que se posicionó con dos de sus obras en el top 10 de obras de arte más costosas de 2023.
